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Medicamentos que alteran la TGO y TGP
Como habrá descubierto durante este producto, las enzimas hepáticas elevadas no siempre significan que su perro tiene una enfermedad hepática y son únicamente una herramienta de diagnóstico que su veterinario empleará para contribuir a su mascota. Si su perro tiene sangre que exhibe enzimas hepáticas altas, no entre en pánico, hable con su veterinario y lleve a cabo un plan para conseguir mucho más información, y comience desde allí. Aunque, de entrada, estos objetivos pueden parecer claros, las alteraciones de las enzimas hepáticas representan un desafío clínico, debido a que los signos tienen la posibilidad de ser poco concretos o aun, en algunos casos, estar ausentes. Además, el hígado juega un papel primordial en la detoxificación de toxinas endógenas y exógenas, y hay un alto número de procesos extrahepáticos que afectan al hígado de forma secundaria.
Aspartato Transaminasa (AST)
Si los valores hepáticos detallan elevaciones, de forma frecuente se necesitan diagnósticos adicionales para corroborar la patología hepática y obtener un diagnóstico. Extrahepático quiere decir que fuera del hígado, las patologías en otros órganos pueden perjudicar el hígado causando enzimas hepáticas elevadas más allá de que no hay una enfermedad hepática real. Las concentraciones de colesterol sérico pueden estar aumentadas, normales o disminuidas en pacientes con enfermedad hepatobiliar. No obstante, las concentraciones anormales de colesterol también tienen la posibilidad de darse en casos de endocrinopatías, obesidad, malnutrición, nefropatía o enteropatía con pérdida de proteínas, pancreatitis o hiperlipidemias primarias.
Por el contrario, la patología inflamatoria del hígado puede estar relacionada con hiperglobulinemia dado a que la fracción no inmunoglobulínica producida por el hígado incluye varias proteínas de etapa aguda. La bilirrubina es el primordial producto de la degradación de los compuestos que poseen conjunto hemo de proteínas (p. ej., la hemoglobina y la mioglobina), por parte de las células del sistema mononuclear fagocitario (SMF). La mayoría de la bilirrubina se crea a lo largo de la supresión de los glóbulos colorados por la acción de la hemo oxigenasa microsomal intracelular. Esta enzima cataliza la degradación de la hemoglobina a hierro, monóxido de carbono, globina y biliverdina.
Por otro lado, los valores disminuidos de AST pueden indicar deficiencia de vitamina B6 en la situacion de personas que precisan diálisis. No obstante, la AST se encuentra en concentraciones elevadas en el hígado y en el músculo, tanto estriado como cardiaco. La AST, exactamente la misma la ALT, está presente en el citosol de los hepatocitos, aunque precisamente un 20% se halla contenida en las mitocondrias. Exactamente la misma la ALT, se tienen la posibilidad de generar aumentos en la actividad plasmática frente lesiones probablemente reversibles en la membrana plasmática hepatocitaria. Por ejemplo, un perro con anemia hemolítica podría requerir una transfusión de sangre, hospitalización y fármacos para parar la hemólisis. Una vez que se detiene la hemólisis y el perro está permanente, las enzimas hepáticas comenzarán a reducir.
En un estudio realizado en una población de perros sanos de diferentes edades se observó una elevación de las enzimas ALT, AST, FA y GGT en el 17%, 11%, 39% y 19% de las situaciones respectivamente 16. En esta situación, la primera cosa que hago es corroborar los desenlaces (repetir la prueba u obtener una segunda exhibe, evitando la hemólisis o la lipemia) para excluir errores laboratoriales. La obtención de la historia clínica es importante para identificar causas potenciales, como la administración de ciertos fármacos (introduciendo tratamientos tópicos o gotas) o signos no reconocidos por los propietarios con anterioridad. La edad es un apunte esencial; en animales jóvenes podemos encontrar elevaciones leves de la FA y en animales mayores las elevaciones enzimáticas tienden a ser compatibles con procesos benignos (hiperplasia nodular), neoplasias o con hepatopatías vacuolares. Entre los pasos más esenciales en estos casos es saber el origen de la perturbación enzimática, puesto que muchas veces, la patología primaria se encuentra lejos del hígado. El diagnóstico y la resolución de la causa principal frecuenta ofrecer rincón a la normalización de las enzimas.